El Museo BMW, situado en Múnich, es un auténtico tesoro para los amantes de las motocicletas y de la historia. Inaugurado en 1973 y renovado en 2008, esta maravilla arquitectónica cuenta con un impresionante espacio de exposición de 4.000 metros cuadrados que muestra la evolución de la línea de automóviles y motocicletas de BMW.
Aunque BMW suele asociarse con su destreza automovilística, el museo dedica una atención significativa a su herencia de motocicletas. Los visitantes son recibidos por una elegante rampa de un kilómetro de largo diseñada para imitar una carretera sinuosa, que los lleva a través de varias salas de exposición temáticas que destacan el diseño, la tecnología, el automovilismo y, por supuesto, las motocicletas. Cada sección alberga artefactos auténticos que cuentan la historia de las innovaciones de BMW, como la R32, la primera motocicleta de la marca, y motos de carreras importantes del rally París-Dakar.
Entre las exposiciones más destacadas, la pared de motocicletas, aunque está detrás de un cristal, presenta modelos icónicos que han dado forma a la reputación de la marca. La pieza central del museo, BMW Platz, es un atrio de 13 metros de altura donde las presentaciones multimedia y los impresionantes juegos de luces crean una atmósfera dinámica.
Para quienes visiten Múnich, una visita al museo es una visita obligada. No solo celebra la rica historia de BMW en la fabricación de motocicletas, sino que también ofrece una visión del espíritu innovador que sigue impulsando a la marca en la actualidad. No pierda la oportunidad de explorar esta fascinante combinación de arte, tecnología y herencia.
Fuente: BMW