La expectación que rodea a la nueva "GS" es innegable, tanto para BMW como para los motoristas. Esta renovación total de la emblemática moto de aventura de BMW era una decisión necesaria, teniendo en cuenta la creciente competencia. Era hora de tomar una posición.
No solo es importante para BMW, sino que los éxitos y fracasos de esta moto resonarán en toda la industria. La influencia de los modelos GS anteriores es evidente y esta última versión no es una excepción. El impacto es de largo alcance.
Sin embargo, la importancia de la nueva GS va más allá de su fabricante y de la industria. Representa una propuesta de conducción extraordinaria: potente y capaz. Conducir la versión Trophy X de la GS aumentó aún más esta sensación. Si bien puede haber motos de aventura más potentes en el mercado, la GS reina como el macho alfa con su asombroso par motor de 149 Nm. Su asiento más alto, de 890 mm de altura, se suma a su naturaleza enfocada y potencialmente difícil de manejar.
A estas alturas, probablemente ya conozcas los aspectos más destacados del rediseño:
Una sorprendente reducción de peso de 12 kilos, que eleva el peso en vacío del modelo base a 237 kg.
Un chasis completamente renovado que utiliza el motor como elemento principal.
Un motor más ligero y potente, ampliado hasta 1.300 cc, con una caja de cambios rediseñada para mejorar el rendimiento.
Dimensiones más pequeñas y peso reducido para una mayor agilidad.
Impresionante estilo aerodinámico y distintivo faro en forma de X.
Quizás también estés familiarizado con la variante Trophy X, que ofrece mejoras orientadas al todoterreno además del modelo base. Estas incluyen un asiento con calefacción, suspensión deportiva, silenciador Akra y más. La Trophy X también cuenta con el paquete Dynamic, que ofrece cambios rápidos, modos Pro Ride y frenos deportivos, junto con el estilo Trophy y el paquete Enduro Pro para mayor comodidad y capacidades todoterreno.
Si bien el GS se destaca en la carretera, realmente brilla fuera de ella. Su desempeño es sobresaliente, con una salvedad: la caja de cambios. En el asfalto, el GS demuestra su potencia, sorprendiendo a quienes subestiman sus capacidades.
Sin embargo, la gran altura del asiento plantea un desafío, ya que hace que las maniobras lentas y los giros cerrados en terrenos difíciles sean exigentes. Si la altura es un problema, se recomienda optar por el asiento estándar o más bajo.
A pesar de su tamaño y estatura, la GS Trophy X no es una moto que los conductores puedan explotar al máximo desde el principio. Requiere familiaridad y comprensión para liberar su verdadero potencial. La altura elevada del asiento acentúa el peso de la moto, lo que la convierte en un desafío formidable para muchos. El tiempo y la experiencia serán gratificantes para aquellos que estén dispuestos a invertir en ella.
En conclusión, la nueva BMW R1300GS Trophy X es una innovación en el segmento de las motocicletas de aventura. Es un testimonio del compromiso de BMW con el progreso y una contendiente digna para quienes buscan un rendimiento incomparable tanto dentro como fuera de la carretera.
Fuente: BMW
